Procedimiento y recuperación
La extracción de implantes mamarios suele durar entre una y tres horas, dependiendo de la técnica utilizada. La recuperación dura entre
una y dos semanas, pero los resultados finales pueden tardar meses o incluso hasta un par de años.
Durante el primer período de tiempo, se recomienda evitar esfuerzos físicos y usar prendas de compresión para facilitar la cicatrización y reducir la acumulación de líquido en el área operada.
En mi caso, no fue un procedimiento doloroso, pero sí que tuve que estar más tiempo de reposo que cuando
me pusieron los implantes. La recuperación total fue lenta.
Expectativas y cambios físicos
Es importante comprender que, después de la extracción, los pechos pueden quedar con flacidez, piel sobrante o asimetría,
especialmente si los implantes eran grandes o se llevaron durante mucho tiempo.
Mi proceso de extracción, como ya he dicho, fue lento. Ahora, después de casi tres años, una de las cosas que me ha ido mejor para la
flacidez, es trabajar los pectorales a través de ejercicios de fuerza física. Hoy en día no parece que hayan pasado por un proceso de extracción.
Beneficios y bienestar
Muchas mujeres que se someten a la extracción de implantes lo hacen por problemas de salud, molestias físicas o simplemente
porque ya no desean mantenerlos. Algunas experimentan alivio de síntomas como fatiga, dolores musculares o
problemas autoinmunes asociados con la enfermedad de los implantes mamarios.
En términos emocionales, algunas mujeres atraviesan un proceso de adaptación a su nueva imagen, por lo que es recomendable compartir experiencias con otras personas en la misma situación.
Aunque la cirugía de un aumento de pecho puede mejorar la autoestima de algunas mujeres, no es una solución mágica para problemas emocionales o de autoconfianza. Algunas mujeres pueden experimentar arrepentimiento o depresión postoperatoria, especialmente si la decisión fue tomada bajo presión social en lugar de motivaciones personales bien reflexionadas. En cuanto a mi experiencia, esto es lo que sentí. Entré en un proceso donde los implantes me generaban mucha incomodidad y molestia en todo, además de incoherencia. Tomar la decisión de retirarme los implantes me hizo conectar con mi origen, apreciando lo que me ha venido dado.
Riesgos y complicaciones
Como cualquier cirugía, existen riesgos como infecciones, sangrado, cicatrices o cambios en la sensibilidad de los pezones. La
flacidez del tejido mamario también es una posibilidad, aunque la piel y el músculo pueden recuperar parte de su forma
con el tiempo, aunque cada cuerpo es diferente.
La elección de un cirujano experimentado también es clave.
En mi operación de extracción, no hubo ninguna complicación y estoy realmente sorprendida por la buena recuperación. En cuanto a la cicatriz, os comparto la persona que me disimuló mis cicatrices a través de tatuaje paramédico
https://www.tatuajeparamedico.es/